Decides comprar una casa
pero la cocina es chica, gran parte del movimiento cotidiano está
relacionado con ella: desde el desayuno en tandas hasta la cena en
familia y su preparación, cuando no el trabajo, gran parte de nuestras
actividades habituales pasan por sus cuatro paredes.
Ahora bien: para aprovechar al máximo un ambiente, es necesario
contar con una distribución apropiada. En el caso de las cocinas,
resulta fundamental, antes de colocar los muebles, pensar cómo vamos a
utilizar el espacio. Lo primero que hay que tener en cuenta es cuáles
son las tareas que vamos a realizar y quiénes son los que van a usar la
cocina, para luego trabajar en función de ello. Básicamente, esta
planificación es una cuestión de determinar los requisitos necesarios
tanto en términos de equipamiento como de lugar de almacenamiento, y el
equilibrio entre ambos con la arquitectura del espacio disponible
SOLUCIONES A MEDIDA
** Cuando la cocina es chica, la sumatoria de electrodomésticos puede
hacer que la línea del mueble se pierda, tapada por la desprolijidad.
Para esa contaminación visual (y la pérdida de valiosa mesada), lo más
aconsejable es empotrarlos. En ese sentido, se ofrecen, por ejemplo,
diseños con heladeras panelables y lavavajillas pequeños integrados al
bajomesada.
** En la cocina hay tres puntos cuya ubicación resulta esencial: la
bacha, los fuegos y la heladera. Tan pronto como se haya decidido el
lugar de este trío, situar los demás accesorios resultará relativamente
sencillo. Ese esquema se conoce como “triángulo de trabajo”, cuyos
vértices ocupan los lugares de más actividad. Cada lado del triángulo
debería tener, aproximadamente, entre 1,2 y 2,7m, sin que el perímetro
total supere los 7,9m. La meta de esta organización tiene que ver con
economizar movimientos y facilitar desplazamientos rápidos y sin
obstáculos mientras se cocina.
** Para sacar mejor partido de las esquinas, una posibilidad es
colocar una estructura de dos o tres pisos con bandejas giratorias. Otra
opción es instalar un módulo rinconero, que consiste en un sistema
doble de bandejas articuladas por un brazo, lo que permite extraerlas
para acceder fácilmente a su contenido y duplicar así la capacidad de
guardado
ORDEN EN LA SALA
Almacenar nuestras cosas en la cocina o en cualquier otro ambiente es un arte que también tiene sus secretos. Desde aquí, algunos consejos:
- Las estanterías altas deben ser estrechas, para que desde abajo podamos ver fácilmente lo que contienen.
- Cuando guardeS demasiadas cosas en una estantería, disponelas en hileras y con los objetos más pequeños adelante.
- Intentá guardar los objetos más pesados a la altura de la cintura: tu espalda se lo agradecerá.
- Aprovechá las partes interiores de las puertas para guardar objetos pequeños, como especias y condimentos.
- Si los gabinetes de almacenamiento son grandes y profundos, considerá la posibilidad de instalar adentro una luz empotrada.
- Tomá en cuenta los accesorios que, por lo general, permanecen sobre
la superficie de trabajo: tanto el tostador como la cafetera o la
juguera pueden ocupar un espacio muy valioso. No los olvides cuando
tomes medidas.